Herrajes decorativos de REI para una fábrica de muebles clásicos

La palabra clásico invita a pensar en calidad, en elegancia y perdurabilidad.

En refinamiento.

Si la unimos a la palabra mueble, se nos antojan estancias impregnadas de distinción, lugares en los que hasta la atmósfera parece exclusiva.

Sumar a ese binomio, muebles + clásicos, los herrajes decorativos que fabrica Reunión Industrial, REI, es traspasar la línea, entrar en un concepto de singularidad al que, aparentemente, pocos tienen acceso; conseguir la combinación perfecta para abrir la caja fuerte de los muebles más valorados, por la calidad de sus materias primas, la singularidad de los diseños y la complicidad de ambas con el catálogo de los exquisitos herrajes decorativos de REI.

Los muebles clásicos son un valor seguro, está demostrado.

Será por la calidad de sus materiales; probablemente también por la seguridad y el confort que ofrece el diseño atemporal con el que son fabricados.

¿Un diseño imperturbable ante el paso del tiempo?

No, eso es un mito. Y los fabricantes de muebles clásicos lo saben.

Y los fabricantes de herrajes decorativos, también.

Especialmente, aquellos que, como REI, prestan atención constante a los cambios, matices y vuelcos del mercado de mobiliario; a sus apuestas vanguardistas, a sus diseños prácticos y, por supuesto, a sus lecturas y relecturas del clásico, de los clásicos, de las infinitas combinaciones que un fabricante de muebles clásicos puede conseguir cuando potencia el valor de sus muebles con herrajes decorativos a la altura del diseño, la calidad y los materiales que ofrece.

¿A quién? Pues a un público que, en muchas ocasiones, dista mucho de ser el clásico público que compraría muebles clásicos.

Eso era antes y, si me apuras, antes de antes.

El fabricante de herrajes decorativos que crea que el concepto de mueble clásico se ha mantenido sólido e inmutable por los siglos de los siglos, desde los mismos albores de la industria de fabricantes de muebles y que los herrajes que mantiene en catálogo, desde tiempos casi inmemoriales, bastan para colmar las expectativas de los fabricantes de muebles clásicos y de sus clientes, ese fabricante está fuera de la realidad, no puede estar más equivocado.

Y, por su parte, los otros fabricantes de herrajes decorativos, los que viven conectados a la cambiante realidad en la que todos vivimos, aunque algunos no se hayan dado cuenta, lo saben.

Saben que hay una parte de la competencia que afronta el presente anclada en un pasado que se desvanece porque está completamente desconectado de la actualidad, descatalogado.

Fabricantes como REI, lo saben y su catálogo de herrajes para muebles clásicos lo demuestra, está en constante movimiento, como el resto de sus propuestas pero de una forma diferente.

Porque los herrajes decorativos para muebles clásicos de REI tienen una particularidad que los diferencia, se trata de un dinamismo distinto del que rige el resto del muestrario, un dinamismo que tiene su propio ritmo, sus propias normas, como esos muebles clásicos que confortan, dan confianza y producen atmósferas de seguridad…aunque cambien, porque cambian.

Los muebles clásicos viven esa, tan aparente como incierta realidad de permanencia, y ello es parte de su encanto y de la fuerte atracción que ejerce esta combinación sobre los clientes que realmente buscan distinguir su entorno, distinguirse en un ambiente clásico y exclusivo que, además, ahora, también tiene que ser sofisticado porque, como hemos recordado anteriormente, los muebles clásicos de hace una décadas no son exactamente lo mismo que hoy entendemos por muebles clásicos, aunque, en ocasiones, coincida.

Actualmente un mueble clásico ha de mantener los estándares que lo identifican como tal con diseños evocadores de tiempos seguros y, sin embargo, traicionarlos un poco; la calidad de unas materias primas excelentes que, además, deberán aportar su certificación de sostenibilidad correspondiente y el toque, el matiz, el aliento ligeramente arriesgado que conceda al diseño una personalidad propia de la tercera década del siglo XXI… y que no solo no reste clasicismo al mueble, sino que lo potencie y lo convierta en exclusivo.

Y eso se puede conseguir, de hecho se consigue, incorporando a los muebles clásicos del siglo XXI el complemento que consolide su carácter de clásico, con todas las cualidades que inspira y, a la vez, potencie la exclusividad de un clásico de nuestro tiempo que, por supuesto, durará para siempre.

No se trata de un farol, sabemos que esa combinación es posible porque REI ha demostrado que así es, que sus herrajes decorativos para muebles clásicos tienen esa capacidad.

A estas alturas del partido, en estos años XX que estamos viviendo, no basta con llamarse clásico, además hay que contar con la complicidad de unos herrajes decorativos que conviertan los muebles del mejor fabricante de muebles clásicos en clásicos eternos, en clásicos infinitos y que, en cada temporada, demuestre que esa magia, esa atracción entre el mueble clásico y los herrajes que lo complementan, puede volver a repetirse.

Y sí, será un clásico.